Los expatriados que se mudan a los Estados Unidos lo pueden hacer siguiendo una multitud de caminos legales diferentes por la miríada de visados que existen en este país. Dos de los caminos más habituales son las visas L1 y la H1B, que sumaron 280.000 visados emitidos en 2022. En ambos casos, es una empresa la que solicita el visado para ti. Por tanto, tú llegarías a EE.UU. con un trabajo. Pero hay otras visas en las que podrías llegar al país sin este apoyo explícito de una empresa. También podría ser que, tras permanecer un tiempo en el país, tu estatus cambie, por ejemplo, porque obtienes la residencia. En esa situación te podrías ver eventualmente en un escenario en el que pierdas el trabajo y, sin embargo, no tengas que abandonar Estados Unidos, ni lo quieras hacer. También está el caso de los cónyuges, por ejemplo, los L2, que llegan al país con derecho a trabajar, pero sin el patrocinio de una empresa.
En todas estas situaciones el expatriado podría necesitar navegar por el mercado laboral americano en busca de un empleo y de ello vamos a hablar en este artículo, que tiene las siguientes secciones:
Desempleo en Estados Unidos
Plazos para conseguir un empleo
Seguro de desempleo
Métodos de búsqueda de empleo
Consejos para buscar trabajo en Estados Unidos
Principales plataformas online
Plan para encontrar empleo en 5 semanas
Como siempre, puedes saltar y leer solo las secciones que te interesen. Sin embargo, si tienes un conocimiento muy limitado del mercado laboral americano, quizás te interesaría leer todo el artículo para evitar sorpresas.
Desempleo en Estados Unidos
Como se puede comprobar en la gráfica a continuación con datos del Departamento de Trabajo y elaborada por la Reserva Federal, la tasa de paro en EE.UU. ha oscilado entre el 3% y el 5% durante los últimos 10 años, con un breve periodo de excepción causado por la pandemia. En abril del 2025 se sitúa en 4,2%.
En este capítulo Estados Unidos gana por goleada a casi todos los países desarrollados. El contrate es muy fuerte con el caso español. Podéis ver en la gráfica a continuación los últimos 15 años. La media anda en torno al 15% con picos por encima del 25%. De hecho, a finales del primer trimestre de 2025 se situó en un 11,4% y eso se le considera cerca de los mínimos históricos. Lo que esto quiere decir es que en EE.UU. el desempleo es extremadamente bajo, y lo ha sido así durante buena parte de su historia. Por tanto, debería ser más fácil encontrar empleo en Estados Unidos, una vez cumples con los requisitos legales básicos, como tener el estatus de inmigración en regla. Otro hecho interesante es el contrate que se puede ver en lo que pasó en 2020. En ambos casos hubo un aumento del paro. Sin embargo, en el caso español fue pequeño, y en el caso americano fue muy pronunciado en muy poco tiempo, aunque después se recuperó casi con la misma rapidez. El mercado laboral americano es más flexible y se adapta con mayor rapidez a las diferentes coyunturas económicas, aunque hay otro motivo para esta diferencia, como veremos después.
A finales del 2023 había en Estados Unidos 6,08 millones de parados (o un 3,8%). Esto se compara con 7,2 millones de parados (4,2%) en mayo de 2025. Sin embargo, voy a utilizar sobre todo datos del cierre del 2023 porque es dónde tengo estadísticas más detalladas del Departamento de Trabajo y, en cualquier caso, las diferencias con la situación en mayo de 2025 son pequeñas. La tasa de empleo (el porcentaje de la población en edad de trabajar que trabaja) es de un 60% en EE.UU., lo que se compara con un 52% en España. En la tabla a continuación podemos ver un desglose de las diferentes categorías que podemos ver en los parados americanos:
El primero comentario es que solo un 24% de estos parados americanos fueron despedidos.
A esto hay que añadir otro 9% que finalizaron contratos temporales. Es complicado encontrar datos igual de detallados en las estadísticas españolas para hacer una comparación punto a punto, pero veo, por ejemplo, que, en 2023, la primera vía de acceso a la protección de desempleo contributiva en España fue la finalización de la contratación temporal, con el 28 % sobre el total de personas beneficiarias.
Después tenemos el 13% que se corresponde a los que dejaron un trabajo por un tiempo predefinido por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que en EE.UU. se denomina habitualmente Temporary Redundancy Plan. Aquí la comparación con España es fácil: este 13% de parados americanos no habría sido contabilizado en España siguiendo las reglas de la EPA. Lógicamente esta regla hace que los datos de paro americanos aparezcan “inflados” cuando se comparan con los españoles; si no, serían todavía más bajos que la tasa del 4% que comentaba antes. Esto también ayuda a entender por qué el crecimiento del paro en 2020 en España no fue mayor. Hubo muchísima gente que tuvo que parar por ERTEs, y directamente no los contaron. En otro caso, el impacto habría sido enorme para las estadísticas, y no tan diferente a lo que se vio en EE.UU. En lo peor de la pandemia llegó a haber en España 3,4 millones de personas afectadas por un ERTE.
Un 14% de los trabajadores americanos renunciaron voluntariamente a sus trabajos. Esta tasa es parecida a la actual de España, de un 13%. Sin embargo, es importante comentar que esto es una novedad relativa en el caso español, ya que esta tasa se ha triplicado desde 2012.
El 30% se corresponde con las reincorporaciones. Estas son personas que solían estar en el mercado laboral, lo dejaron durante un tiempo prolongado, y buscan ahora reincorporarse. En esta categoría vemos la mayor diferencia por género, con 8 puntos más en el caso de las mujeres. Esto no sorprende porque en EE.UU. es habitual que uno de los cónyuges (habitualmente la mujer, aunque no siempre) deje su trabajo durante 5-7 años para cuidar de los hijos pequeños. Los motivos son varios. El coste anual de una guardería en EE.UU. es, en promedio, unos 10.000$ por niño, y la mitad de los americanos tienen problemas para conseguir plaza. La educación pública en muchos distritos no comienza hasta los 5 años. Los salarios son más altos en EE.UU. y muchas parejas jóvenes pueden permitirse sobrevivir durante unos años con un sueldo.
Por último, tenemos el grupo de trabajadores que se incorporan por primera vez al mercado laboral, que son un 9%. Realmente hay una gran divergencia según el grupo de edad. Para hombres y mujeres mayores de 20 años es solo de un 5%. Pero para trabajadores entre 16 y 19 años sube hasta el 41%. Muchísima gente trabaja desde su edad adolescente en EE.UU., aunque solo lo haga durante el verano, los fines de semana o a tiempo parcial. Nota: En la tabla a continuación los totales cubren todos los trabajadores de más de 16, pero el desglose por género solo estaba disponible para mayores de 20.
Plazos para conseguir un empleo
El plazo medio para encontrar trabajo para un parado en EE.UU. es de 23 semanas. Sin embargo, la mediana es de solo 10 semanas. La mediana es el plazo máximo que tardan el 50% de los trabajadores. Es decir, la media son 5 meses y la mediana poco más de 2 meses. Ambas son cifras de abril de 2025 con desestacionalización. Esto se compara con los cerca de 12 meses que se tarda en España, y que llegaron a ser 18 meses en 2014. Sin bien estas diferencias son significativas, una vez profundizas un poco en los números verás que el contrate es todavía mayor de lo que puede parecer.
Según el plazo que se requiere para encontrar empleo en EE.UU. se consideran 3 grupos más o menos del mismo tamaño:
Los que tardan menos de 5 semanas: 2,2 millones de parados
Los que tardan entre 5 y 14 semanas: 2,3 millones
Los que tardan más de 14 semanas: 2,6 millones
Es decir, el 63% encuentra trabajo en menos de 14 semanas. Quizás en empleos de baja cualificación se pueda completar un proceso de selección en unos pocos días, pero los trabajos que emplean a los expatriados tienen habitualmente requerimientos mayores, y los procesos no son tan rápidos. Por este motivo, en mi opinión, los que encuentran trabajo en menos de 5 semanas, seguramente ya lo tenían buscado antes de salir de la anterior empresa. Si el trabajador está en el segundo bloque (de 5 a 14 semanas) probablemente consiguen trabajo en la primera ronda de procesos de selección a la que se candidatan nada más salir de su empleo. O esto, o ya tenía el trabajo buscado, pero la fecha de incorporación no era inmediata; o quizás se tomaron uno o dos meses para asuntos propios antes de comenzar la nueva etapa laboral. Después tenemos un bloque del 14% que tarda entre 15 y 26 semanas. Estos son los que probablemente no consiguieron trabajo a la primera, quizás porque el proceso en el que estuviesen tuviese algún otro candidato bien cualificado. Pero diría que estos probablemente consiguieron trabajo en la segunda ronda de procesos de selección. Por último, tenemos el bloque de los que tardan más de 27 semanas (23%). Esto es lo que en EE.UU. se considera paro de alta duración. Aquí, de nuevo, tenemos una divergencia en las definiciones. En España se considera alta duración más de 1 año en el paro. Y, de hecho, se hace seguimiento estadístico, incluso, de los que llevan más de dos años en el paro.
La tabla presentada previamente muestra el desglose de los parados españoles según el plazo que llevan demandando empleo. Con esto, el 27% de los parados llevan menos de 3 meses buscando trabajo, lo que se contrapone con el 63% que veíamos antes para el caso americano. El 13% de los españoles están en el tramo de 3 a 6 meses, contra un 14% en el caso americano. Pero la gran diferencia está en el último grupo; el más dramático porque son los que tardan mucho en encontrar empleo. El 59% de los españoles tarda más de 6 meses, contra un 23% en el caso de Estados Unidos. Sería interesante poder contrastar, además, los bloques de paro de más de 12, 18 y 24 meses. Pero en EE.UU. no se les hace seguimiento. Para los americanos es casi inconcebible estar parado de forma involuntaria tanto tiempo, y probablemente esos grupos son muy pequeños. Casi un 30% de los españoles parados (más de 800.000) llevan más de dos años en esa situación. Lógicamente la prestación por desempleo ya se les ha agotado después de ese periodo. Así que muchos españoles viven una situación realmente dramática, que es impensable para los americanos.
Seguro de desempleo
Este asunto lo hemos tratado en otro artículo. Hacemos aquí un breve resumen. Las prestaciones de desempleo públicas varían sustancialmente entre estados. Si hablamos primero de las cantidades, la prestación máxima oscila entre los 823$ por semana de Massachusetts y los 235$ de Misisipi. Podemos ver aquí que las cantidades podrían ser relativamente generosas. En el caso de Massachusetts esto equivaldría a 3.320€ al mes. Misisipi equivaldría a 948€ al mes. Es mucho menos, pero ten en cuenta que es el estado con menores beneficios. Estas cifras las puedes comparar con el tope de 1.399€ que se paga en España para una familia con 1 hijo. 42 de los 50 estados del país están por encima de esta cifra y varios pagan más del doble.
El otro parámetro importante a tener en cuenta es la duración de este subsidio. En España tienes que haber trabajado un año para tener derecho a prestación, en cuyo caso esta duraría 4 meses. Pero si has acumulado más antigüedad en el trabajo podrías tener derecho a subsidio por mucho más tiempo. En concreto, si has mantenido tu empleo durante más de 6 años, tendrías derecho a 2 años de paro. La cobertura en Estados Unidos es mucho más limitada temporalmente y oscila entre las 28 semanas de Montana y las 12 de Florida. Es decir, desde poco más de 6 meses hasta 3 meses escasos. La mayoría de los estados están en las 26 semanas, que es justo 6 meses.
En resumen, el subsidio se gestiona a nivel estatal, es claramente más generoso que el de España, pero se limita habitualmente a unos 6 meses. Sin embargo, los trabajadores no pueden quejarse mucho, porque el 77% consigue encontrar trabajo en menos de ese plazo. También algunos consideran que una forma de incentivar a la gente a encontrar trabajo lo antes posible y no ser dependiente del estado es justamente limitar en el plazo de los subsidios.
Otro contraste curioso es el relativo a quién disfruta de estos subsidios. En España, en torno a 1 millón de parados no cobran subsidio (lo que supone un 37% del total), la mayoría porque ya no les corresponde. Recordemos que hay 800.000 personas en España que llevan más de 2 años parados. Pero son pocos los parados que no solicitan el beneficio. Sin embargo, en EE.UU. el 74% de los parados no solicitan el subsidio de desempleo. De los que no lo solicitaron el 55% lo hicieron porque pensaban que no les correspondería, por ejemplo, porque fueron ellos los que decidieron dejar el trabajo. El resto cita todo tipo de motivos como el hecho de que esperaban encontrar trabajo rápidamente o porque literalmente están en contra del concepto de subsidio de desempleo, que algunos consideran un recurso para los vagos. Ojo, porque esta gente renunció a una cifra de entre 1.000€ y 3.000€ al mes por estas causas. Increíble las diferencias de mentalidad que podemos ver a veces entre ciertos segmentos de la sociedad americana y la española.
Métodos de búsqueda de empleo
Los parados en búsqueda de trabajo utilizan un promedio de 1,8 métodos para encontrarlo. Los métodos varían, pero hay dos predominantes que utilizan más de la mitad de las personas: enviar currículos o formularios de solicitud a las empresas, o contactarlas de forma directa, sea por correo electrónico o, muy habitualmente, por teléfono. El tercer método más utilizado es apoyarte en tu red de contactos; preguntar a amigos y familiares por oportunidades que pudieran conocer (24%). Este método, sin embargo, es menos utilizado por los jóvenes, pero su uso va aumentando con la edad. Lógicamente con los años nuestra red de contactos va aumentando en tamaño y profundidad. Se puede comprobar todo esto en detalle en el cuadro a continuación.
Dado que en España es más difícil encontrar trabajo, no sorprende que los españoles lo intenten por más medios simultáneamente. En concreto los españoles utilizan una media de 2,1 métodos para buscar empleo. Sin embargo, esta no es la diferencia más importante en este capítulo entre EE.UU. y España. Los españoles se apoyan mucho más en su estructura social, en su red de contactos, que es el método de búsqueda principal y que usan el 55% de los parados (contra un 24% en el caso americano). El contacto directo con las empresas es el segundo método, aunque se usa algo menos que en Estados Unidos (39% vs 52%). Algo parecido sucede con el envío de currículos (37% vs 54%). La actualización del cv en internet es una opción escogida por el 37% de los españoles (vs 54% de los americanos). Casi la mitad de los españoles estudian el mercado laboral revisando anuncios de empleo, y un 32% de ellos llegan a responder a estos anuncios. Sin embargo, este método ha caído en desuso en Estados Unidos y lo emplean solamente el 12% de los americanos. Los españoles también utilizan algo más las agencias de empleo, tanto públicas como privadas, aunque estas siguen siendo un método secundario.
Consejos para buscar empleo en Estados Unidos
Indeed es una de las plataformas principales en Estados Unidos para la búsqueda de empleo y publicaba un artículo donde daba 11 consejos a la hora de buscar empleo:
1. Red de contactos
Mantén y amplia tu red de contactos siempre que puedas. Ya hemos visto que es un método importante en Estados Unidos y los españoles y los hispanos en general brillamos especialmente en el uso de esta técnica. Sin embargo, esta opción puede ser difícil de utilizar para el expatriado, especialmente cuando acaba de llegar al país.
2. Portales de empleo online
En la actualidad la mayoría de las ofertas de empleo son digitales. Además, estas herramientas te permiten opciones de búsqueda, como palabras clave, que no existían en los métodos tradicionales. No puede extrañar que en un artículo de Indeed se destaque este método. Pero es que realmente los procesos de búsqueda se producen mayoritariamente online; aún más en Estados Unidos que en otros países como España. Además de Indeed yo recomendaría Linkedin y Glassdoor, por diferentes motivos. Hablo de las plataformas más importantes un poco más abajo.
3. Reclutadores y agencias de empleo
Los headhunters operan a veces como consultores individuales o con pequeñas oficinas. Pero también hay corporaciones importantes como Korn Ferry, Robert Half, Spencer Stuart o Heidrick & Struggles. De hecho, un artículo de Forbes destaca estas cuatro firmas como las mejores. Es una opción cómoda para las empresas, por el servicio que reciben, aunque en muchos casos no es lo primero que intentan. Ya hemos visto que no es una de las técnicas principales que utilizan los empleados.
Además de las agencias de empleo privadas están también las públicas, tanto a nivel federal como a nivel estatal. Por ejemplo, CareerOneStop es una de las herramientas principales que se utiliza en la actualidad en este entorno. Algunos estados obligan a hacer un número mínimo de gestiones en estos portales si no se pueden presentar detalles de otras ofertas de empleo en curso, como requisito para poder cobrar el subsidio de desempleo. Por otra parte, USAjobs.gov es el lugar al que acudir si lo que buscas es un empleo público a nivel federal. Además, cada estado tiene su propia herramienta para los empleos públicos estatales.
4. Referencias
Es una técnica tan antigua como la civilización, y algunas empresas se apoyan fuertemente en ella. En algunos casos ofrecen a sus empleados un “finder fee”, una pequeña cantidad de dinero, si una persona que ellos recomiendan acaba siendo contratada por la empresa. En este sentido, si buscas empleo, pregunta a tus amigos y familiares, para que comprueban si sus empresas están reclutando.
5.Ferias de empleo
Algo menos habitual en países como España, con un paro estructural permanente. Las ferias de empleo se suelen organizar por sector. Se celebran en algún centro de convenciones, hotel o similar y se intenta atraer al público con entradas gratuitas y algún evento interesante, especialmente cuando los sectores enfrentan falta de trabajadores, lo que sucede periódicamente en Estados Unidos. Muchas universidades también organizan ferias de empleo, especialmente para sus estudiantes que están más próximos a la finalización de sus estudios.
6. Sitios web de empresas
Algunas empresas optan por mantener sus ofertas de empleo en su página web. Antes de completar tu solicitud, infórmate sobre quiénes son, a qué se dedican, quiénes son sus clientes y si tu experiencia laboral se ajusta a sus necesidades. Conocer toda esta información demuestra que realmente quieres una oportunidad laboral con ellos.
7. Contacto directo con la empresa vía correo electrónico
Aunque este método suele ser menos efectivo, puedes contactar directamente con una empresa, incluso si no tienen ofertas de empleo vigentes. El correo electrónico sigue siendo la forma más común. En tu correo electrónico de solicitud de empleo, comparte un poco sobre ti y explica por qué te interesa la empresa. Adjunta una versión actualizada de tu currículum y un enlace perfil en Linkedin.
8. Prácticas
Las prácticas profesionales son una excelente manera de mejorar tu currículum, tanto si estás al principio de tu carrera profesional como si quieres aprender nuevas habilidades. Algunas prácticas pueden convertirse después en un puesto a tiempo completo, así que esfuérzate siempre y busca oportunidades para asumir más responsabilidades. Las prácticas también ofrecen una excelente oportunidad para ampliar tu red profesional y conseguir recomendaciones valiosas.
9. Visitas sin cita previa
Entrar en un local de negocio y solicitar una oportunidad es una buena manera de encontrar trabajo en comercio minorista, restaurantes, hostelería y otros sectores de servicios. Al hacerlo, asegúrete de vestir apropiadamente para el tipo de negocio y pregunta educadamente si la empresa está contratando. Prepárate para la posibilidad de que quieran entrevistarte en el momento. Esta técnica, sin embargo, no te va a funcionar en muchos otros sectores.
10. Periódicos
Si bien ya no es el principal lugar para buscar trabajo, la sección de empleo de un periódico puede ser un buen lugar para buscar empleos locales en tu comunidad. Los periódicos y publicaciones especializadas también pueden ser un buen lugar para encontrar un trabajo especializado.
11. Voluntariado
Ser voluntario en una organización es una forma de aumentar tus posibilidades de conseguir un trabajo allí. Esto es especialmente cierto para las organizaciones sin ánimo de lucro que actualmente no tienen los fondos para contratar. Si te ven como un trabajador esforzado y una parte integral de la organización, podrías tener muchas opciones cuando se abra un puesto remunerado. Incluso si no puedes conseguir un trabajo allí, tener experiencia como voluntario mejora cualquier currículum, amplía tu red y te ayuda a aprender más sobre roles que te pueden interesar.
Principales plataformas online
La web money.com destacaba 5 plataformas para la búsqueda de empleo: Linkedin, Indeed, Glassdoor, Simplify y ZipRecruiter.
Linkedin es una red social, como Facebook, pero centrada en el mundo profesional. Se ha convertido en un recurso casi imprescindible en el mundo corporativo, tanto para mantener y aumentar tu red de contactos, como para promocionar tu imagen profesional y la de tu empresa. También se utiliza masivamente para buscar empleo y empleados. Money.com consideraba Linkedin como la mejor opción en general y citaba las siguientes ventajas e inconvenientes:
Ventajas
Funciones de redes sociales
Ofertas de empleo de alta calidad
Alertas
Desventajas
Limitaciones sin membresía Premium
Las funciones Premium son caras
Indeed es una plataforma que se centra en el mercado de empleo. Money.com la considera la mejor opción en cuanto a la diversidad y el volumen de los trabajos disponibles.
Ventajas
Gran cantidad de ofertas de empleo
Reseñas de empleados sobre la empresa
Ideal para quienes buscan trabajo a distancia
Diseño web intuitivo
Desventajas
Falta de opciones de búsqueda
Glassdoor es una página web que se centraba inicialmente en compartir información de los niveles salariales medios de cada tipo de trabajo. Y en esto siguen siendo los mejores, según la opinión de Money.com. La verdad es que yo los he usado primordialmente con este objetivo. Sin embargo, la web permite también la oferta y búsqueda de empleos, con estas ventajas e inconvenientes:
Ventajas
Información salarial
Reseñas de la empresa
Desventajas
Diseño poco intuitivo de la aplicación móvil
Verificación de identidad y requisitos de acceso
Simplify es la mejor opción si buscas el soporte de funcionalidades AI. Es compatible con los portales de empleo de muchas compañías, hace muy fácil el proceso de auto-rellenado de formularios, pero sus funcionales premium son bastante caras (39.99$ al mes). La verdad es que a diferencia de las tres anteriores, no conozco esta plataforma y no puedo opinar. Si estoy bastante de acuerdo con los comentarios de Money.com para Linkedin, Indeed y Glassdoor.
Por último, tenemos ZipRecruiter. Había oído hablar de ella, aunque nunca la utilicé. El artículo destaca las capacidades de la app de ZipRecruiter y la calidad de su motor de búsqueda y señala limitaciones en las capacidades AI de la aplicación. La versión premium es gratuita para los empleados.
Plan para encontrar empleo en 5 semanas
Harvard Business Review, la revista de negocios de Harvard, publicaba un artículo con un plan para buscar empleo en 5 semanas. Voy a resumir a continuación las ideas principales.
Semana 1: Actualiza tu CV
Además de actualizar tus últimas experiencias y logros profesionales destacables, HBR recomienda incluir detalles a respecto de tus habilidades transferibles, que son todas aquellas tareas en las que eres bueno y que puedes aplicar a diversos puestos en varias industrias. Por ejemplo, una buena capacidad de redacción, la gestión del tiempo y la resolución de problemas son lo que se considerarían "habilidades transferibles". HBR recomienda agrupar estas habilidades en 3 categorías: orientadas a los sistemas (las que están relaciones con las áreas de pericia de tu sector), orientadas a las personas (referidas a tu capacidad de comunicarte efectivamente con los demás) y orientadas a uno mismo (que reflejan tu capacidad de trabajar diligentemente, aprender rápido, ser creativo y aplicar nuevas soluciones a problemas).
Semana 2: Mejora tu perfil en Linkedin
Como ya comenté Linkedin se ha convertido en la herramienta por defecto del mundo profesional. Existe toda una ciencia a respecto de cómo hacer tu perfil más atractivo. Por ejemplo, es importante incluir en tu perfil palabras clave que tus posibles empleadores podrían estar utilizando en sus filtros de búsqueda. Una forma de encontrarlas es copiar y pegar las descripciones detalladas de 10 ofertas de empleo de tu sector que encajasen con lo que buscas. Pega todo este texto en una herramienta de Word Cloud para poder visualizar rápidamente los elementos que más se procuran. Otra idea es actualizar las fotografías de tu perfil, buscando un ángulo profesional, pero amistoso; también la foto del banner, que es una de las primeras cosas que se ven al entrar en tu perfil.
Semana 3: Charlas informales
Una vez identificas algunas empresas que podrían resultar interesantes y posibles empleadores, busca en tu red de contactos (otra vez en Linkedin) para ver si conoces ya a alguien que trabaje en dicha empresa. Si no fuese el caso, puedes utilizar Linkedin u otras redes para intentar establecer contacto. Siempre hay personas muy activas en las redes sociales con los que es fácil conectar. Una vez has realizado esa conexión, escribe a esta persona e intenta proponer una charla informal. El objetivo de dicha charla no es conseguir trabajo. Estás haciendo tu investigación detallada a respecto de la empresa. Prepara algunas preguntas para la conversación, pero mantén un tono informal. Es bueno saber cosas como: los objetivos principales de la empresa, sus mayores dificultades en la actualidad, en que áreas de negocio están contratando personal y qué perfiles están buscando, qué tipo de cultura tiene la empresa y los mayores ventajas e inconvenientes de trabajar para ella.
Semana 4: Pide referencias a tus contactos
Ahora que ya conoces bien las empresas objetivo es el momento de utilizar tu red de contactos para intentar entrar en algún proceso de selección. Cuando puedas, utiliza tus amigos, colegas y familiares; y si no es el caso, apóyate en las personas que has contactado en la semana anterior. Sé directo y honesto a respecto de cuáles son tus intenciones y objetivos al llegar a este punto. Habitualmente tu contacto no va a ser el reclutador en sí, pero tu objetivo es que te conecte con esa persona o con esa iniciativa. Si tu contacto accede a enviar tu cv al reclutador con una pequeña nota, ya estás en una posición de ventaja con respecto a la mayoría de los candidatos externos para el puesto.
Semana 5: Prepara tu entrevista
Hay muchos lugares en los que leer consejos de cómo preparar una entrevista de trabajo, tanto si es virtual, como si es presencial. Quizás debería escribir un artículo específicamente sobre este tema. En mi opinión, una vez conoces tanto la empresa como el puesto al que te estás candidatando deberías escribir una serie de preguntas como las siguientes. Describe tu último empleo. Describe brevemente el resto de tu experiencia profesional. Tres fortalezas y tres áreas de mejora. ¿Por qué has solicitado este puesto de trabajo? ¿Qué aportarías a este trabajo? ¿Por qué debería contratarte? ¿Dónde te ves a largo plazo en tu carrera profesional? ¿Cuáles son los mayores obstáculos que vas a tener para realizar este trabajo con éxito y cómo vas a superarlos?
Con el conocimiento que tienes de lo que la empresa está buscando, responde a las preguntas de forma detallada, destacando en cada caso los aspectos de tu experiencia profesional que crees que podrían resultar atractivos para la empresa. Y una vez tengas tu redacción de estas respuestas, ensáyalas. Es muy probable que muchas de estas preguntas salgan de forma natural durante la entrevista, lo que te dará una oportunidad de proporcionar una respuesta muy bien preparada. Incluso si no te preguntan alguna de ellas, puedes ofrecer algunos de estos detalles proactivamente en la entrevista. Por ejemplo, si no te han preguntado sobre los obstáculos que vas a enfrentar, puedes explicarlo al final, cuando te pregunten si tienes algo más que añadir. Demostrará al entrevistador que te has tomado muy en serio la oportunidad y que te has preparado concienzudamente.