Llegas a Estados Unidos y tienes que decidir exactamente dónde vas a vivir, tu casa, tu dirección. El criterio más importante para muchos expatriados, así como una buena parte de las familias americanas con hijos, no es otro que la calidad de las escuelas. En la mayoría de los distritos escolares hay una escuela específica para cada edad en función de la dirección exacta en la que vives. En esos casos no tienes opción de escoger escuela dentro del sistema público. Por eso dos casas que sean casi idénticas y estén a dos lados de la misma calle pueden tener precios muy diferentes, en función de las escuelas que cada una tiene asociadas. Algunos artículos citaban que estas diferencias en precio podrían moverse en el rango entre los 50.000$ y los 300.000$.
Hay un segundo factor que afecta al criterio de la forma contraria. Las casas resultan más atractivas cuanto más bajo es su property tax (recordamos que este es el equivalente al IBI). Pero como este impuesto es proporcional al valor de las casas, y las casas más caras son las que tienen los mejores colegios, habitualmente esto significa que, si quieres un buen colegio, tanto el precio de la casa como el de su property tax van a ser probablemente elevados. Tenemos sin embargo unas enormes diferencias por estados. El estado con el property tax más elevado es Nueva Jersey con un 2,2%. Esto quiere decir que si compras una casa de 400.000$, cosa habitual en muchas zonas de ese estado, el property tax va a estar cerca de los 9.000$ al año (compara eso con lo que pagabas de IBI en España). Siguen a Nueva Jersey, Illinois, Tejas y buena parte de los estados de la región noreste del país, habitualmente por encima del 1,7%. En el otro lado del espectro están estados como Alabama, West Virginia, Colorado y otros estados del medio-oeste y del sur, que oscilan entre el 0,5% y el 0,7%. Además de que el porcentaje del impuesto es menor, el precio de las casas en estos lugares es habitualmente mucho más bajo también. Esto lleva al property tax medio de todas las casas del estado a oscilar entre los 9,196$ al año de Nueva Jersey y los 841$ de Alabama, el más bajo del país. Ten en cuenta también que el colectivo de expatriados europeos suele moverse por encima de estas medias. Es decir, suelen vivir en barrios más caros y pagar más impuestos que la media de los residentes.
Escogiendo estado
El expatriado podría pensar que este apartado no tiene sentido. La oferta de empleo para emigrar a Estados Unidos le impondrá, lógicamente, un lugar de residencia. Pues no tan rápido. Incluso antes de la pandemia había una proporción enorme de empleados que teletrabajaban en EE.UU. Y no un día, sino todos los días. Esto se acentuó todavía más con el covid. Algunos estudios estiman que en torno a un cuarto de los trabajadores del país operan de esta forma. Incluso el 16% de las empresas, solo tienen trabajadores remotos. No tienen oficina. Mi experiencia personal trabajando para una gran multinacional en la zona de Nueva Jersey fue que solamente el 10% del personal asociado a la oficina acudía con regularidad, tres o cuatro veces por semana. Otro 15% asistía en torno a una vez por semana. Y el resto iban una vez cada 1 o 2 meses o, literalmente, nunca. Esto era en 2011, no durante el covid.
Es perfectamente posible que tu empresa te permita trabajar remotamente, en cuyo caso podrías escoger cualquier lugar en el país en el que vivir, aunque quizás debas buscar un lugar bien comunicado, como un sitio cercano a un aeropuerto con buenas conexiones. O también es posible que te permitan escoger destino de entre una lista de oficinas de tu empresa distribuidas por el país. En algunos casos negociar tu ubicación con tu empresa va a tener un impacto económico y de bienestar para tu familia mayor que el salario y los beneficios que pudieran ofrecerte. Recuerda que EE.UU. es más mucho más grande que toda Europa junta. De hecho, es más del doble que toda la Unión Europea (9.1 m. km2 vs 4.4 m. km2). Escoger la ciudad en la que vivir en EE.UU. puede ser como escoger entre Londres, Valencia y Bucarest.
Si eres afortunado y estás en este caso, entonces podrías escoger estado. Si no tienes hijos entonces los criterios que van a tener más peso (más allá de los laborales) podrían ser los impuestos, el coste de las viviendas y de la vida, en general. Otros artículos en este site hablan de todas estas cuestiones. Pero si tienes hijos, entonces a estos criterios vas a añadir, y quizás en la cabeza de la lista, la calidad de las escuelas. Este es el listado de los 10 estados con mejores valoraciones medias de sus escuelas. El listado completo se puede consultar aquí.
Massachusetts: 73,1
Connecticut: 67,5
New Jersey: 64,4
Virginia: 61,7
New Hampshire: 61,6
Maryland: 60,2
Delaware: 58,1
Nebraska: 57,8
Wisconsin: 57,5
Vermont: 57,4
Massachusetts, Connecticut y Nueva Jersey suelen liderar estos rankings, alternando posiciones en función del criterio exacto que se busca. Desafortunadamente, y como ya vimos, estos estados tienen también los precios de vivienda y de property tax más elevados del país.
Hay una estrategia diferente para escoger estado cuando el nivel educativo es prioritario. La idea es que no necesitas que la educación de todo el estado sea excelente. Solo necesitas que tu distrito escolar lo sea. Algunas personas buscan estados con impuestos bajos, aunque el nivel educativo medio del estado sea bajo. Y después buscan un distrito escolar dentro de dicho estado de buen nivel. Así algunos expatriados escogen distritos en los suburbios al norte de Atlanta en Georgia, en determinadas localizaciones de Tejas, como Austin, en Carolina del Norte en ciudades como Chapel Hill o Cary, etc. Un artículo de Forbes mencionaba a los condados de Marin (California), Collin (Tejas), Hamilton (Indiana), Norfolk (Massachussets) y Montgomery (Maryland), como los de mejores resultados escolares en comparación con el coste de las viviendas.
Escogiendo distrito
Supongamos que en este punto ya has escogido un estado e, incluso, una zona dentro de dicho estado en la que vivir. Ahora quieres escoger vivienda en una zona geográfica que abarca, digamos, dos o tres condados. Para que os hagáis una idea, un condado en EE.UU. tiene una superficie media de 2.842 km2, que es como la cuarta parte de una provincia en España. Dicho esto, los condados del noreste suelen ser más pequeños que los del resto de EE.UU.
Sin duda un agente inmobiliario podrá proporcionarte información útil a este respecto. Pero es bueno investigar las posibilidades incluso antes de llegar a EE.UU. utilizando herramientas como Zillow. Ahí podrás encontrar todo tipo de información relativa a la vivienda, tanto sus precios, como sus impuestos, como las escuelas designadas a cada dirección, e incluso una valoración de dichas escuelas que está extraída de greatschools.org.
Aunque Zillow es un buen lugar donde comenzar, yo recomendaría visitar a continuación Greatschools. En mi experiencia personal la información que Zillow muestra respecto de la valoración de las escuelas no siempre está actualizada. A veces está un curso desfasada. Al entrar en Greatschools introduce primero el nombre del municipio y el estado. A continuación, puedes aplicar filtros, como mostrar solo institutos o solo escuelas primarias. También puedes filtrar por escuelas públicas, privadas o charter. Hablaremos de estas opciones en los siguientes apartados. Por ejemplo, con esta selección mostraríamos todos los institutos en el municipio de Alpharetta, un suburbio al norte de Atlanta conocido por la calidad de sus escuelas. Vemos que se muestran un total de 13 institutos, aunque solo 4 de ellos (los públicos) tienen un rating, mientras que los privados no lo tienen, ya que los privados siguen sus propios planes de estudio y no siempre reportan la información de la misma forma que las otras escuelas al estado, de dónde Greatschools obtiene sus datos de referencia. En este caso, los institutos públicos muestran (2022) valoraciones entre 9 y 7.
Greatschools tiene también información de las fronteras del distrito escolar. En este ejemplo puedes ver las calles que están cubiertas por un instituto en concreto. Esto te permite saber qué escuela tiene asignada un barrio o calle determinada. Zillow utiliza información similar para proporcionar los datos de escuelas asignadas a cada vivienda. Hay que tener cuidado, sin embargo, si estás considerando una zona de rápido crecimiento demográfico. Condados en esta situación tienen que construir nuevas escuelas de forma acelerada, y cada vez que una de estas escuelas abre, tienen que redibujar el mapa de distribución geográfica de lo que cada escuela cubre. Municipios que están en esta situación podrían tener información desfasada tanto en Greatschools como en Zillow. Incluso si la tienen actualizada, a ti te va a interesar conocer el mapa del próximo curso, no el del actual. En este caso lo mejor es consultar con el agente inmobiliario, que suelen conocer bien estos temas.
En el ejemplo previo, supongamos que quieres escoger alguno de estos institutos. ¿Deberías simplemente ir al que tenga una mayor valoración y buscar casa en esa zona? Aquí tengo dos recomendaciones. La primera es que estudies en mayor detalle los componentes de la valoración que proporciona Greatschools. Por ejemplo, si revisamos el instituto Alpharetta High vemos que tiene en estos momentos una valoración global de 8, cuando hay otro en la zona con una valoración de 9. Pero una vez que entramos en los detalles del análisis vemos que este 8 se ha calculado como la media entre 4 categorías:
Notas medias: 9
Progreso de los estudiantes: 9
Preparación para la universidad: 10
Igualdad: 5
También vemos que este instituto ha ganado premios al éxito universitario en 2018, 2019, 2020, 2021 y 2022 en función de sus resultados en la preparación de los estudiantes para la educación superior.
Realmente en todos los elementos académicos, la escuela es excelente y tan buena como la que más. ¿Qué es esa categoría de Igualdad realmente? Greatschools te permite navegar por la estructura detrás de las evaluaciones. Parece ser que en este caso el motivo de esa nota más baja es que los estudiantes provenientes de hogares de menor poder adquisitivo (que son solo el 11% del total) tienen unos resultados académicos inferiores a los de los otros estudiantes de la escuela.
Yo he visto ejemplos (en otros estados) incluso más dramáticos donde un instituto recibía una valoración global de 7, con una valoración académica de 10 y una de igualdad de 4. Y en el capítulo de igualdad los estudiantes de hogares de bajos ingresos eran solo el 8% de la escuela, y sus resultados eran buenos, muy por encima de la media del estado, aunque algo peores que los de los otros estudiantes del instituto. Personalmente no me parece muy razonable proponer una valoración media de 7 para un instituto en una situación como esa. Pero aquí, todo depende de cuáles son los elementos que le importen a cada uno. Una vez tengas la lista de centros de una zona, revisa las categorías principales de rating para poder fijarte en lo que te interesa a ti. No te quedes solo con la evaluación media.
Un dato académico objetivo en el que te puedes fijar, y que greatschools suele mostrar en el capítulo de College Readiness, es la nota media en el SAT (Standarized Assessment Test). Este es un examen del estilo del Selectivo (ahora denominado EBAU). Tiene una estructura y unos baremos estandarizados, lo que permite hacer comparaciones objetivas entre institutos. El rango de evaluación se sitúa en la actualidad entre 1 y 1600. Los test estandarizados no lo son todo. Pero al menos sí son objetivos y no se pueden manipular tan fácilmente como otros datos.
A la hora de escoger distrito, lógicamente te centrarás en las escuelas del rango de edad de tus hijos (primaria, media o instituto). Pero ten en cuenta también lo que vendrá después. Quizás lo más importante es escoger bien el instituto, por la influencia que puede tener en las posibilidades de acceso a buenas universidades. Si tus hijos aún están en middle school (por ejemplo) no consideres solo las escuelas de ese rango de edad. Estudia también los institutos que tendrían asignados después; incluso si tienes pensado estar pocos años en EE.UU. Yo siempre digo aquello de que vine a EE.UU. por tres años… hace 12 años. Es posible que acabes extendiendo tu estancia en este país algo más de tiempo de lo inicialmente pensado. Y en ese caso, no vas a querer mudarte solo porque los niños terminan grado 8 y el instituto que tienes asignado es muy malo, aunque el middle school era excelente. Planea pensando en el futuro.
Open enrollment
Todo lo anterior tiene una excepción importante. Hay bastantes estados que permiten a los distritos la posibilidad de ofrecer un open enrollment. Esto quiere decir que los estudiantes podrían solicitar una escuela diferente de la que tienen asignada a su residencia. A pesar de esta opción legal, muchos distritos escogen no implementarla, y es posible que no esté disponible en el municipio que estés considerando. Pero en otros lugares, como es el caso de Florida, no es así. Este estado tiene inscripción abierta sin restricciones para todas las escuelas públicas. Lo que esto significa es que puedes enviar a tu hijo a cualquier escuela pública en Florida, independientemente de dónde vivas o dónde se encuentre la escuela. Esto es un arma de doble filo. Por un lado, tienes la opción de solicitar escuelas de alto nivel académico sin la necesidad de vivir muy próximo a ellas, aunque tendrás que encargarte tú mismo de buscar una solución de transporte del niño en ese caso. Pero esas escuelas suelen tener tanta demanda que están capped. Quiere decir que no pueden atender todas las solicitudes recibidas. Al menos en algunos condados, lo que vi es que dichas escuelas celebraban loterías para decidir qué niños accedían cada año. Y en algunas las probabilidades de entrar eran de menos del 20%, aunque podías seguir presentándote a la lotería todos los años. Todo esto supone también que mudarte al lado de una de dichas escuelas no te garantizaba nada. Los niños que ya estaban en la escuela tienen prioridad y tú, al llegar nuevo como expatriado, tendrás que pelearte vía lotería con cualquier niño de cualquier lugar del estado que quiera acceder a dicha escuela. Además, estas escuelas suelen tener una regla de protección familiar de forma que, si un niño está en la escuela, cuando su hermano menor alcanza la edad que dicha escuela cubre, dicho niño tiene prioridad y no necesita pasar por la lotería. Esto de nuevo te pone en desventaja como expatriado, al igual que les sucede a los ciudadanos americanos que se mudan a ese lugar desde otros estados el país.
Escuelas privadas
Como en cualquier país, existe también la alternativa de las escuelas privadas. Ya hemos explicado que, en Estados Unidos, a pesar de la prevalencia de los servicios privados en casi todos los ámbitos, el segmento privado solo representa el 10% de la educación escolar del país. Algunos datos:
En Estados Unidos hay 22.440 escuelas privadas para K-12. El coste medio de la matrícula es de $12.350 por estudiante y año.
Como siempre, los precios varían mucho entre estados. El precio medio en Nebraska es de $2.800 y en Vermont es de $27.100. En este mapa puedes ver los costes de matrícula de cada estado.
La enseñanza secundaria tiene unos costes medios algo más elevados que los cursos de primaria, alcanzando los $16.040.
El grupo más numeroso de escuelas privadas son las escuelas católicas con 5.128 centros, cerca de una cuarta parte del total. Ojo, decimos escuelas católicas; no escuelas cristianas o protestantes, a pesar de que el conjunto de religiones protestantes en este país dobla en fieles a los católicos (49% vs 23%). Aquí existe una tradición específica importada de Europa. Estamos hablando de las escuelas de curas y monjas de toda la vida, pero en su versión americana. La matrícula media es bastante más moderada ($4.840).
Hay también 260 internados privados en el país (las llamadas boarding schools). El coste medio de la matrícula, alojamiento y comida es de $37.590.
Comparar los resultados y la calidad entre escuelas privadas y públicas se convierte rápidamente en un ejercicio difícil de hacer sin sesgos. Un dato que sí se puede dar es que el 77% de los graduados en escuelas privadas completan sus estudios universitarios a curso por año, contra un 64% de los graduados en escuelas públicas. En mi opinión personal, sin embargo, diría que comparar las escuelas privadas, que cubren una población mucho más limitada y, por motivos económicos, exclusiva contra el promedio de la gigantesca educación pública, con enormes variaciones dentro de la misma, podría ser una comparación un tanto injusta. Si comparas la educación privada con el segmento de las mejores escuelas públicas las diferencias se desvanecen rápidamente.
A pesar de ello, puede haber motivos para preferir una escuela privada. Entre los más citados están:
Ratio de estudiantes por profesor más bajo
Mejores medios (laboratorios, herramientas, etc)
Más actividades extracurriculares
Buenos programas académicos avanzados: Advanced Placement, International Baccalaureate, etc. Aunque es cierto que muchas escuelas públicas no tienen estos programas, las mejores escuelas públicas sí suelen ofrecerlos.
La escuela pública que tengo asignada por mi dirección no es de calidad, y puedo permitirme la alternativa privada. El mismo argumento para un nuevo expatriado sería: escoger una escuela privada me permite una mayor libertad a la hora de decidir dónde voy a vivir, porque no estoy limitado por la escuela asociada por el distrito escolar a una dirección particular.
Escuelas Charter y Magnet
Charter y Magnet son dos palabras que el expatriado podría escuchar al llegar a EE.UU. cuando comience a informarse sobre el sistema educativo. Estos dos modelos pueden resultar polémicos y tienen acérrimos defensores y también grandes detractores. En este apartado vamos a intentar explicar cómo funcionan estas entidades.
Las escuelas charter se financian con fondos públicos a través de los impuestos, pero son operadas por compañías privadas. Estas escuelas a menudo son establecidas, operadas y mantenidas por organizaciones con ánimo de lucro y no necesariamente están sujetas a los mismos estándares que las escuelas públicas tradicionales. Existe un debate sobre si estas escuelas deben definirse como privadas o públicas. Los defensores del modelo charter afirman que son escuelas públicas porque están abiertas a todos los estudiantes y no cobran matrícula. Los críticos de las escuelas charter afirman que la operación privada de las escuelas chárter sin responsabilidad pública las convierte en instituciones privadas subsidiadas por el público. En 2015 6.700 escuelas charter inscribían a 2,9 millones de estudiantes en los Estados Unidos.
Cualquier generalización que se intente hacer sobre estas escuelas alternativas está condenado al fracaso. Por una parte, existen estudios que concluyeron que más de una cuarta parte de las nuevas escuelas chárter habían cerrado después de 5 años, y más de la mitad después de solo 15 años de funcionamiento. Pero por otra parte hay también múltiples casos de escuelas exitosas. Por ejemplo en este artículo se explica cómo un grupo de escuelas charter de Massachussets tuvieron mejores resultados que la (ya elevada) media de dicho estado. Sin embargo, algunos han criticado la obsesión de ciertas escuelas y su foco casi exclusivo en los resultados en test estandarizados mientras abandonaban otros elementos esenciales de la educación. Aunque algunos han comparado las Charter con el modelo de colegio concertados en España, ya que ambas se financian con fondos públicos y se gestionan por entidades privadas, yo diría que hasta ahí llegan las semejanzas, y en la práctica es realmente un modelo diferente.
Al final todas estas generalizaciones pueden ser irrelevantes para tu caso particular. Si quieres considerar el modelo charter deberías centrarte en estudiar exclusivamente la escuela charter próxima a tu residencia. Yo comprobaría primero que la escuela lleva años operando. Si es relativamente nueva puede ser un tanto peligroso, como hemos visto. Al ser operadas por compañías privadas con ánimo de lucro, si pierden dinero van a cerrar, aunque lleven pocos años funcionando. Y entonces va a ser un follón cambiar a tus hijos de nuevo. A continuación, yo revisaría otros temas como los resultados académicos de esa escuela en concreto.
Las escuelas magnet son escuelas públicas con cursos o planes de estudio especializados. "Magnet" se refiere a cómo las escuelas atraen a estudiantes de más allá de los límites normales definidos por las autoridades, como las fronteras locales que delimitan los distritos de las escuelas públicas. Asistir a una escuela magnet es voluntario. Hay escuelas magnet en los niveles de primaria, media y secundaria. En los Estados Unidos, donde la educación está descentralizada, algunas escuelas magnet son establecidas por distritos escolares y cubren solo dicho distrito, mientras que otras son establecidas por gobiernos estatales y pueden cubrir múltiples distritos. Algunas escuelas magnet tienen un proceso de admisión competitivo que requiere un examen, una entrevista o una audición. Otras escuelas magnet utilizan un sistema de lotería y un último grupo combina ambos modelos.
La mayoría de las escuelas magnet se concentran en una disciplina o área de estudio en particular, mientras que otras (como las escuelas de International Baccalaureate) tienen un enfoque más general. Los programas magnet pueden enfocarse en un área académica (matemáticas, ciencias naturales e ingeniería, humanidades, ciencias sociales, bellas artes o artes escénicas) o pueden enfocarse en la educación técnica o vocacional. Si tu hijo tiene habilidades extraordinarias en un área de conocimiento y carece de motivación o interés para estudiar las otras áreas, o si tiene muy muy claro a qué se quiere dedicar en la vida, quizás el modelo magnet es una opción para ti. Aunque yo tendría cuidado de no buscar esa especialización a una edad demasiado temprana. Todos los niños deberían tener una base en todas las áreas del saber.